viernes, 30 de diciembre de 2016

Y Dios dijo

Si nadie te ama, mi alegría es amarte.
Si lloras, estoy deseando consolarte.
Si eres débil, te daré mi fuerza y mi alegría.
Si nadie te necesita, yo te busco.
Si eres inútil, yo no puedo prescindir de ti.
Si estás vacío, mi ternura te colmará.
Si tienes miedo, te llevo en mis brazos.
Si quieres caminar, iré contigo.
Si me llamas, vengo siempre.
Si te pierdes, no duermo hasta encontrarte.
Si estás cansado, soy tu descanso.
Si pecas, soy tu perdón.
Si me hablas, trátame de tú.
Si me pides, soy don para ti.
Si me necesitas, te digo: estoy aquí dentro de ti.
Si te resistes, no quiero que hagas nada a la fuerza.
Si estás a oscuras, soy lámpara para tus pasos.
Si tienes hambre, soy pan de vida para ti.
Si eres infiel, yo soy fiel contigo.
Si quieres hablar, yo te escucho siempre.
Si me miras, verás la verdad en tu corazón.
Si estás en prisión , te voy a visitar y liberar.
Si te marchas, no quiero que guardes las apariencias.
Si piensas que soy tu rival, no quiero quedar por encima de ti
Si quieres ver mi rostro, mira una flor, una fuente, un niño.
Si estás excluido, yo soy afiliado.
Si todos te olvidan, mis entrañas se estremecen recordándote.
Si no tienes a nadie, me tienes a mí.
Si eres silencio, mi palabra habitará en tu corazón.

sábado, 24 de diciembre de 2016

¿Cómo he nacido?


¿Cómo he nacido?
Dice Dios:
Nací desnudo para que tú sepas despojarte de ti mismo.
Nací pobre para que tú puedas considerarme la única riqueza.
Nací en un establo para que tú aprendas a santificar cada ambiente.
Nací débil para que tú no tengas nunca miedo de mí.
Nací por amor para que tú no dudes nunca de mi amor.
Nací de noche para que tú creas que te puedo iluminar cualquier realidad.
Nací persona para que no te avergüences nunca de ser tú mismo.
Nací hombre para que tú puedas ser "Dios".
Nací perseguido para que tú sepas aceptar las dificultades.
Nací en tu vida para atraer a todos a la casa del Padre.
Jesús nace entre los pobres, los marginados, los que sufren, lloran, gritan al cielo, los afligidos, los oprimidos, cuantos lo sirvan y esperan

Texto de los Sacerdotes del corazón de Jesús. Revista Juventud Reparadora, nº 358

jueves, 22 de diciembre de 2016

Adora y Confía -Teilhard de Chardin



No te inquietes por las dificultades de la vida, por sus altibajos, por sus decepciones, por su porvenir más o menos sombrío. Quiere lo que Dios quiere.

Ofrécele en medio de inquietudes y dificultades el sacrificio de tu alma sencilla que, pese a todo, acepta los designios de su providencia. Poco importa que te consideres un frustrado si Dios te considera plenamente realizado, a su gusto.

Piérdete confiado ciegamente en ese Dios que te quiere para sí. Y que llegará hasta ti, aunque jamás lo veas. Piensa que estás en sus manos, tanto más fuertemente cogido, cuanto más decaído y triste te encuentres.

Vive feliz. Te lo suplico. Vive en paz. Que nada te altere. Que nada sea capaz de quitarte tu paz. Ni la fatiga psíquica. Ni tus fallos morales.

Haz que brote, y conserva siempre sobre tu rostro,una dulce sonrisa, reflejo de la que el Señor continuamente te dirige. Y en el fondo de tu alma coloca, antes que nada, como fuente de energía y criterio de verdad, todo aquello que te llene de la paz de Dios.

Recuerda: cuanto te deprima e inquiete es falso. Te lo aseguro en el nombre de las leyes de la vida y de las promesas de Dios.

Por eso, cuando te sientas apesadumbrado, triste, adora y confía

Teilhard de Chardin

lunes, 19 de diciembre de 2016

Tarde te he amado - San Agustín



Tarde te he amado, Belleza siempre antigua
y siempre nueva. Tarde te he amado.
Y, he aquí que tú estabas dentro y yo fuera.
Y te buscaba fuera. Desorientado, iba corriendo
tras esas formas de belleza que tú habías creado.
Tú estabas conmigo, y yo no estaba contigo
cuando esas cosas me retenían lejos de ti,
cosas cuyo único ser era estar en ti.

Me llamaste, me gritaste e irrumpiste
a través de mi sordera. Brillaste,
resplandeciste y acabaste con mi ceguera.
Te hiciste todo fragancia, y yo aspiré
y suspiré por ti. Te saboreé, y ahora
tengo hambre y sed de ti. Me tocaste,
y ahora deseo tu abrazo ardientemente.

San Agustín

viernes, 25 de noviembre de 2016

Decálogo para recordar sanamente





1. No te lamentes de las oportunidades perdidas. Mientras lo haces, quizás esté pasando el último tren por delante de tu casa, tal vez está amaneciendo de nuevo, acaso alguien esté llamando a tu puerta.

2. No sigas castigándote por los errores cometidos. Es como repetir siempre la misma asignatura. De este modo, nunca aprenderás la lección del amor que Dios te regala cada día, ni el arte de conjugar la vida. El pasado pasó. ¡Desahoga en Él tus afanes!

3. Vive agradecidamente el presente: es tu tiempo y tu tarea. De lo contrario, tu futuro puede convertirse en una vana ficción.

4. En la adversidad y en la debilidad haz también memoria: reaviva energías que ya usaste, despierta recursos qué conoces, desempolva entusiasmos que ya gozaste. Saborearás de nuevo la vida.

5. No uses de tu pasado como pretexto compensatorio, como arma arrojadiza contra alguien, como acumulador de resentimientos: terminará por ser más fuerte que tú.

6. La nostalgia es actitud de necios. Lo mejor, lo más interesante, lo nuevo (incluso cuando la soledad parece cegarte) es tu presente: acógelo, sácale partida.

7. Si ya no tienes objetivos, ilusiones y esperanza aterrizarás forzosa y peligrosamente en el pasado. Deja, por tanto, que por algún resquicio de tu alma o de tus ventanas, entre un poco de aire que mantenga vivo el rescoldo.

8. Mira siempre agradecido a tu pasado. No te faltan motivos para ello. Descubrirás que, a pesar de todo, ha valido la pena haber sido escogido desde la eternidad de Dios para la aventura maravillosa de la vida.

9. Vive cada día como una nueva oportunidad. En el pórtico de la Vida que te ha sido prometida, ya puedes decir (con modestia, claro): Confieso que he vivido.

10. Haz memoria de Jesucristo, resucitado de entre los muertos. La fe de los cristianos tiene su origen en la historia de Aquél que pasó entre nosotros haciendo el bien. Pero no pasó. Sigue vivo. Ser y hacer memoria de Él es apuntarse a la mejor conjugación: He vivido, vivo y... viviré.


lunes, 31 de octubre de 2016

La sonrisa



No cuesta nada pero vale mucho.
Enriquece al que la recibe,
Sin empobrecer al que la da.

Se realiza en un instante,
y su memoria perdura para siempre.

Nadie es tan rico
que pueda prescindir de ella,
ni tan pobre que no pueda darla.

Y, con todo, no puede ser comprobada,
mendigada, robada,
porque no existe hasta que se da.

Y si en el momento de comprar,
el vencedor está tan cansado
que no puede sonreír,
¿quieres tu darle una sonrisa?.

Porque nadie necesita tanto una sonrisa
como los que no tienen una

para dar a los demás.

San Alberto Hurtado

miércoles, 19 de octubre de 2016

Poema sobre el perdón: Si una espina me hiere...



¡Si una espina me hiere, me aparto de la espina,
...pero no la aborrezco! Cuando la mezquindad
envidiosa en mí clava los dardos de su inquina,
esquívase en silencio mi planta, y se encamina,
hacia más puro ambiente de amor y caridad.

¿Rencores? ¡De qué sirven! ¡Qué logran los rencores!
Ni restañan heridas, ni corrigen el mal.
Mi rosal tiene apenas tiempo para dar flores,
y no prodiga savias en pinchos punzadores:
si pasa mi enemigo cerca de mi rosal,

se llevará las rosas de más sutil esencia;
y si notare en ellas algún rojo vivaz,
¡será el de aquella sangre que su malevolencia
de ayer, vertió, al herirme con encono y violencia,
y que el rosal devuelve, trocada en flor de paz!

Amado Nervo



miércoles, 12 de octubre de 2016

Si me quieres, quiéreme entera



Si me quieres, quiéreme entera,
no por zonas de luz o sombra...
Si me quieres, quiéreme negra
y blanca. Y gris, y verde, y rubia,
y morena...
Quiéreme día,
quiéreme noche...
¡Y madrugada en la ventana abierta!

Si me quieres, no me recortes:
¡Quiéreme toda... O no me quieras!


Dulce María Loynaz

martes, 11 de octubre de 2016

Acaríciame




Vengo a Ti para que me acaricies
antes de comenzar el día.
Que tus ojos se posen
un momento sobre mis ojos.
Que acuda a mi trabajo sabiendo
que me acompañas, Amigo mío.
¡Pon tu música en mí
mientras atravieso el desierto del ruido!
Que el destello de tu Amor
bese las cumbres de mis pensamientos
y se detenga en el valle de la vida,
donde madura la cosecha.

R. Tagore


viernes, 7 de octubre de 2016

Todo queda en nada sin Ti




Cuántas energías buscando el aplauso
que al terminar me deja vacío.
Años de esfuerzo para lograr títulos
que no cambian nada lo que soy.

Desvelos para preparar un proyecto
Pasa el proyecto, y siguen los desvelos.
Cuánto trabajo modelando una imagen
que no es más que fachada.
Nada, al final todo queda en nada
y en mí crece el vacío.

Tú sigues paciente, esperando,
con esa ternura sonriente.
Solo Tú, lo repito pero ¿lo creo?
Solo en Ti, lo aprendí pero ¿lo vivo?

Tendrá que derrumbarse todo
hasta que sólo queden escombros
para que te devuelva la mirada
para que no me quede otro asidero
y vuelva a ser aquel niño indefenso
que no puede hacer nada
sólo llorar y dejarse abrazar.

Javi Montes, sj




martes, 27 de septiembre de 2016

Secretos para ser feliz



Un sabio, al ver la sencillez y la pureza de una niña, le dijo: A ti te enseñaré los secretos para ser feliz. Ven conmigo y presta mucha atención.

Mis secretos los tengo guardados en dos cofres, y éstos son: mi mente y mi corazón, y consisten en una serie de pasos que deberás seguir a lo largo de tu vida.

El primer paso, es saber que existe la presencia de Dios en todas las cosas de la vida y por lo tanto, debes amarlo y darle gracias por todas las cosas que tienes.

El segundo paso, es que debes quererte a ti mismo y todos los días al levantarte y al acostarte, debes afirmar: Yo soy importante, yo valgo, soy capaz, soy inteligente, soy cariñoso, espero mucho de mí, no hay obstáculo que no pueda vencer.

El tercer paso, es que debes poner en práctica todo lo que dices que eres. Es decir, si piensas que eres inteligente actúa inteligentemente; si piensas que eres capaz, haz lo que te propones; si piensas que eres cariñoso, expresa tu cariño; si piensas que no hay obstáculos que no puedas vencer, entonces proponte metas en tu vida y lucha por ellas hasta lograrlas.

El cuarto paso, es que no debes envidiar a nadie por lo que tiene o por lo que es. Ellos alcanzaron su meta, logra tú las tuyas.

El quinto paso, es que no debes albergar en tu corazón rencor hacia nadie; ese sentimiento no te deja ser feliz; deja que las leyes hagan justicia, y tú perdona y olvida.

El sexto paso, es que no debes tomar las cosas que no te pertenecen. Recuerda que mañana te quitarán algo de más valor.

El séptimo paso, es que no debes maltratar a nadie. Todos los seres del mundo tenemos derecho a que se nos respete y se nos quiera.

Y por último, levántate siempre con una sonrisa en los labios, observa a tu alrededor y descubre en todas las cosas el lado bueno y bonito; piensa en lo afortunado que eres al tener todo lo que tienes; ayuda a los demás, sin pensar que vas a recibir nada a cambio; mira a las personas y descubre en ellas sus cualidades y dales también a ellos el secreto para ser triunfadores y que de esta manera, puedan ser felices.

¡Aplica estos pasos y verás que fácil es marcar la diferencia y ser feliz!

No subestimes el poder de tus acciones; con un pequeño gesto puedes cambiar la vida de otra persona para bien o para mal. Dios nos pone a cada uno frente a la vida de otros para impactarlos de alguna manera.

jueves, 22 de septiembre de 2016

Esta mañana




Esta mañana
enderezo mi espalda,
abro mi rostro,
respiro la aurora,
escojo la vida.

Esta mañana
acojo mis golpes,
acallo mis límites,
disuelvo mis miedos,
escojo la vida.

Esta mañana
miro a los ojos,
abrazo una espalda,
doy mi palabra,
escojo la vida.

Esta mañana
remanso la paz,
alimento el futuro,
comparto alegría,
escojo la vida.

Esta mañana
te busco en la muerte,
te alzo del fango,
te cargo, tan frágil.
Escojo la vida.

Esta mañana
te escucho en silencio,
te dejo llenarme,
te sigo de cerca.
Escojo la vida.


Benjamín G. Buelta, sj